Extinción Devónica

Hace 372 millones de años, nacía un tiktaalik llamado Nait que cambió por completo el rumbo de la historia, fue el primer pez que salió del agua y se adentró desde muy pequeño en tierra seca, lo que lo llevó, periódicamente a modificar sus aletas e ir transformándolas en una especie de patas con las que se arrastraba cada vez más lejos de la orilla, pero debía volver antes de morir asfixiado, aunque desarrollaba rápidamente su capacidad para respirar en el exterior.

Cierto día lluvioso, realizando su itinerario llegó tan lejos que se encontró de repente hambriento y casi sin poder respirar, pero visualizó algo que hasta ese momento no había advertido: una planta. Ésta era de un color verde brillante con hojas puntiagudas de siete puntas, efectivamente se trataba de la primera versión de las Cannabaceae (Cannabis Sativa). Dominado por su apetito, decide darle un mordisco a una de las que aparentemente eran sus flores y estaban prácticamente sobre el suelo ya que la humedad de las precipitaciones hizo que se doblaran sus puntas hasta tocar el piso; de repente se sintió mareado y desconcertado, le sucedió una cosa realmente increíble: pudo percibir su propia existencia, había adquirido la capacidad de la conciencia, miró hacia el cielo y notó la lluvia cayendo, observaba a su alrededor y quedaba absolutamente maravillado con los objetos que podía discernir y que antes ignoraba. Pero ya estaba dejando de respirar y era hora de volver al mar.

Realizó este trayecto en varias ocasiones, todas las veces se alimentaba de esta planta y paulatinamente iba adquiriendo la capacidad de pensar, y entre una de sus meditaciones decidió que debía ayudar a otros peces a llegar a esa instancia. Lo intentó incansablemente, trató de comunicarse con los demás, pero resultó imposible, no existía un lenguaje que expresara sus ideas, pero hubo una hembra, a quien llamó "Xul", que parecía interesada en él y comenzó a seguirlo a todas partes. Entonces intentó llevarla a la orilla y le mostró que era capaz de salir del océano, ella siguió sus pasos pero se quedó sin poder respirar momentos después, y desesperada saltó varias veces hasta llegar al agua; poco a poco iba mejorando su habilidad de respirar fuera del mar y cada vez llegaban más lejos tierra adentro, aunque todavía no podía comunicarse ya que los procesos de pensamiento de Xul eran precarios como los de todo pez, solo imitaba sus actos.

Pasados ​​unos meses y practicando todos los días, llegaron por primera vez hasta el lugar donde residía esa planta maravillosa de la que se alimentaba Nait y le había dado prodigiosos resultados, entonces la compartió con ella, pero en unos instantes ocurrió algo sumamente inesperado, los ojos de Xul parecían desorbitados y comenzó a saltar desesperadamente, entró en pánico y perdió el juicio, pasados ​​unos segundos encontró la calma pero toda esta actividad la había dejado exhausta. Nait trató de arrastrarla hasta la orilla pero ella ya no tenía fuerzas, y lentamente ambos iban perdiendo el aliento, y resultó lo inevitable: perecieron allí, lejos de la orilla, uno al lado del otro.

Sus restos fueron encontrados por científicos en la Isla Ellesmere en el año 2004, pero nunca se conoció la verdadera historia.